MENTAL, UN LENGUAJE
FALSABLE

¿Es MENTAL una teoría científica?

“El rasgo esencial de la ciencia no es su verificabilidad sino su falsibilidad” (Karl Popper)

“En tanto que un enunciado científico habla sobre realidad, debe ser falsable; y en tanto no es falsable, no habla de la realidad” (Karl Popper)



El Falsacionismo de Popper

El problema de la inducción

El “falsacionismo”, también denominado “refutacionismo” o “principio de falsabilidad” es una teoría de la ciencia desarrollada por el filósofo Karl Popper. En esencia, la teoría se basa en el problema que plantea la inducción (o inferencia inductiva) −problema que ya fue puesto en evidencia por Hume en el siglo XVIII− que consiste en inferir un enunciado universal a partir de hechos particulares.

El ejemplo que pone Popper es el de los cisnes. Si observamos repetidamente cisnes blancos, podemos inferir que “todos los cisnes son blancos”. Pero basta con que aparezca un cisne negro (o que no sea blanco) para que este enunciado universal sea falso. Por lo tanto, según Popper: El falsacionismo de Popper realmente no es más que un modus tollens lógico. En una sentencia lógica del tipo pq (si p, entonces q), el modus ponens es: si p es verdadero, entonces q es verdadero. Y el modus tollens es: si q es falso, entonces p es falso.


Las dos versiones del falsacionismo

La versión ingenua o dogmática del falsacionismo es la ilustrada con el ejemplo de los cisnes: basta solo un caso negativo para rechazar el enunciado general. Además, considera las sentencias científicas generales de forma individual.

Popper propuso posterirmente una versión renovada del falsacionismo (el falsacionismo metodológico), que se basa en no rechazar la teoría por un solo caso, sino plantear dos posibles causas:
  1. Problemas en la observación, puesto que ninguna observación está libre de la posibilidad de error: ¿Son fiables nuestros instrumentos de observación? ¿Los hemos utilizado correctamente? ¿Hemos observado realmente lo que teníamos que observar? ¿Hemos aplicado correctamente el procedimiento de observación?

  2. El conocimiento que proporciona el soporte de la observación puede ser incompleto o defectuoso.
Además, la versión renovada no considera sentencias individuales, sino la teoría completa. Que falle una sola sentencia de la teoría no justifica el rechazar la teoría completa. Un posible “arreglo” de la teoría ante una observación en contra es incluir excepciones en la sentencia general. En el caso del ejemplo de los cisnes, si aparece un cisne negro en Australia, la sentencia universal habría que modificarla (restringirla, en este caso) para tener en cuenta el nuevo hecho: “Todos los cisnes son blancos excepto en Australia”. Otra alternativa sería introducir la probabilidad, basada en datos estadísticos; por ejemplo, “La probabilidad de que un cisne sea blanco es del 98%”.


Evaluación de la Teoría de Popper

Popper ha sido un autor muy influyente en la filosofía del siglo XX. Su teoría falsacionista nació con la publicación en 1934 de su obra −hoy considerado un clásico− “La lógica de la investigación científica” [2011] y supuso un fuerte giro y un cierto cuestionamiento en la forma de entender la metodología de las teorías científicas.

Ha habido numerosas críticas a la teoría de Popper. Se ha llegado a afirmar que el falsacionismo es la antítesis del inductismo. Incluso se ha acusado a Popper de poner todo en cuestión, de dudar de todo. Las críticas más comunes son las siguientes: Según Thomas Kuhn, la ciencia se fundamenta en paradigmas, esquemas conceptuales que condicionan la forma de percibir la realidad y de elaborar las teorías científicas.

Para Imre Lakatos, la ciencia progresa por la falsación de programas de investigación, más que por la falsación ingenua de sentencias universales.

Para Paul Feyerabend, las teorías científicas que ganan aceptación general se basan en factores sociales, más que en el seguimiento de un puro método racional.

Para Charles Sanders Peirce, las matemáticas son más importantes que las ciencias positivas, pues estas ciencias se fundamentan en conceptos matemáticos, y la matemática trasciende la realidad, pues su objetivo no es averiguar cómo son las cosas, sino cómo podrían ser, en este universo o en algún otro. En este sentido, la falsabilidad no tiene sentido.


MENTAL y la Falsabilidad

En este tema tenemos las siguientes características:
Codificación

El ejemplo de los cisnes (inferencia inductiva): El ejemplo de los cisnes blancos con la excepción de los australianos: Con MENTAL es posible aplicar a cada expresión x un factor f entre 0 y 1 para especificar el grado de certeza o validez de dicha expresión, en donde 1 supone considerarla en su integridad (1*x = x) y 0 el ignorarla completamente (0*x = θ). Este factor f es de tipo subjetivo, aunque se basa en datos objetivos. Por ejemplo, la sentencia s “Todos los cisnes son blancos” lo podríamos codificar así:

f*⟨( x/cisne → x/blanco )⟩

Si, por ejemplo, asignamos a f el valor de 0.9, estamos considerando que la sentencia s es válida al 90%. Pero, en este caso, es más lógico aplicar el factor al consecuente de la condición:

⟨( x/cisne → f*(x/blanco) )⟩

En este caso, f=0.9 indicaría que el grado de verdad de que un cisne sea blanco es del 90%.

También podríamos aplicar el factor al atributo blanco:

⟨( x/cisne → x/(f*blanco) )⟩

Suponiendo que (0.5*blanco = gris) y (0*blanco = negro), un valor f=0.5 indicaría cisne gris, y un valor f=0 indicaría cisne negro.



Adenda

Los 3 mundos de Popper

Para Popper, hay 3 mundos:
  1. El mundo exterior: las entidades físicas (la realidad objetiva y corpórea).

  2. El mundo interior: el no corpóreo de las entidades mentales (los fenómenos subjetivos y los estados de conciencia).

  3. Los productos de la mente humana, que son entidades que tienen existencia propia. Es el mundo de la cultura, incluyendo todos los productos del intelecto humano (los contenidos filosóficos, científicos, artísticos, etc.).
Estos 3 mundos interactúan entre sí. Las teorías científicas y las leyes lógicas pertenecen al tercer mundo.

Popper no creía en la causalidad descendente, sino en la ascendente: la naturaleza es creativa, siendo el hombre el resultado supremo de esta creatividad. El hombre es un fenómeno emergente, el resultado de un proceso de evolución gradual de la naturaleza. La mente y la conciencia son epifenómenos del cerebro.

Para Popper hay 3 mundos. Pero según el principio universal de causalidad descendente, solo hay una realidad profunda y todo lo demás son manifestaciones.

La concepción de Popper se diferencia respecto a los 3 mundos de Penrose en que para éste, el mundo 3 es el mundo de las matemáticas. Según Penrose, la realidad es una sola unidad clasificable en tres mundos:
  1. El mundo físico. Es la realidad sensible y perceptible a través de las sensaciones. El fundamento ontológico del mundo físico es matemático.

  2. El mundo de experiencias psíquicas, personales e intersubjetivas. Es el mundo psíquico donde acontece la conciencia.

  3. El mundo matemático. Es un mundo platónico: eterno, armónico y perfecto. Los elementos matemáticos poseen una existencia que sólo puede ser descubierta a través de la inteligencia.

Probabilidad y falsacionismo

Existe una corriente de pensamiento que sostiene que la lógica empleada en la inferencia inductiva no es la adecuada, y propone utilizar el concepto de probabilidad y las leyes probabilísticas (en concreto, el teorema de Bayes) como fundamento de la inferencia inductiva, para así ofrecer una metodología segura, estándar y universal para la ciencia.

La probabilidad de un suceso o fenómeno es el cociente entre el número de casos favorables observados (un número finito) y el número de casos posibles. En el caso de que el número de casos posibles sea infinito, la probabilidad es cero.

El matemático Thomas Bayes, en el siglo XVIII, ideó una simple fórmula matemática para calcular la probabilidad de una hipótesis condicionada:

Pf(h/e) = Pi(hP(e/h)/P(e) Es decir: probabilidad condicional = probabilidad incondicional × poder predictivo.

El teorema de Bayes combina el razonamiento inductivo y el deductivo mediante el nexo común del concepto de probabilidad: Sin embargo, el concepto de probabilidad y el teorema de Bayes tampoco sirven como fundamento de la inducción:
La conjetura de Goldbach

Un ejemplo de falsabilidad matemática es la conjetura de Goldbach, uno de los problemas abiertos más antiguos en teoría de números: todo número par se puede escribir como la suma de dos números primos (iguales o distintos). Por ejemplo, 6=3+3, 12=5+7, 14=3+11, etc. Hasta ahora no se ha encontrado un ejemplo que haga falsable la conjetura. Ha sido comprobada por ordenadores para todos los números pares menores de 1018. La mayor parte de los matemáticos creen que es cierta.


Bibliografía